De lógica digital y la vida real

En mi infancia recibí mi primera computadora, una Printaform con procesador 80286 y 2 megas de memoria, lo primero que hice con ella fue escribir el comando "del command.com", (el comando "del" borraba archivos, e inicialmente en MS-DOS 3.0 no había distinción de un archivo de sistema y uno X, en este caso "command.com" el cual era primordial para que tu computadora arrancara) lo cual echó a perder el sistema. Imagínese mi frustración, querido lector, que la computadora que a mi padre le había costado un dineral en cifras de 8 ceros y había sido descompuesta por un comando de quince letras escritas cuando estudiaba el funcionamiento con el manual del usuario. Recuerden que en ese entonces nuestra moneda estaba muy devaluada y peor aún, las computadoras eran muy caras, pese a ser tan simples. Yo tenía en ese entonces doce años, y pude haber dejado la máquina por ahí y decirle a mi padre que no servía, pero no podía, él hizo un sacrificio para comprármela y yo debía encontrar la manera de repararla.

En ese entonces no había muchos usuarios de computadoras, así que buscar quién te apoyara con el disco 1 de MS-DOS 3.0 era un poco difícil ¿Internet? ¿qué era eso? ¿Ciber Cafés? No existían. Estaba casi seguro de que no iba a poder arreglarla, pero recordé que un amigo mío estudiaba ingeniería en sistemas y tenía una computadora igualita a la mía, así que le dije que si me podía copiar el disco 1 de MS-DOS para mi pc, y afortunadamente me pudo ayudar. A partir de ahí fui muy cuidadoso con mis discos y con los comandos de MS-DOS, aunque nunca dejé de experimentar con ellos, muy al contrario, había nacido mi pasión por las computadoras

De ese tiempo para acá han pasado muchas cosas, y aunque nunca estudié sistemas, y de hecho soy técnico en energía solar, conozco las computadoras casi como la palma de mi mano. Usarlas, conocerlas de manera interna y externa me han enseñado una cosa, y se aplica perfectamente a la vida diaria, yo la llamo "El principio del if-then". Lo explicaré sencillamente: IF y THEN,  además de ser palabras en inglés, son comandos muy comunes en lenguajes de programación, como lo son BASIC, Visual C, Pascal, HTML, Turbo C, y software de oficina, como el ya familiar Excel. IF (si) THEN (entonces) implican que si yo hago una cosa, obtengo otra en consonancia con mi orden inicial. Si yo doy una orden determinada, la respuesta se dará a lugar tal y como yo la programé. Su contraparte humana es lo que en varias filosofías y religiones se llama karma.

Bajo ésta lógica, si yo hago algo bueno, querido lector, y pese a que puedan pasarme cosas malas después de haber hecho esa buena acción, al final recibiré algo bueno, y si hago algo malo, pese a los beneficios temporales que pueda recibir, siempre mi castigo llegará a mí, como un péndulo. Todas mis acciones tienen consecuencias, nadie se escapa a ese IF THEN

Consideremos, si yo decido vivir honrada y dignamente, puede que me pasen muchas cosas, tanto buenas como malas, lo mismo si decido vivir una vida deshonesta, pero al final ¿quién se enorgullece de sus faltas, de sus delitos y de sus robos? Todos los delincuentes suelen cubrir o negar sus faltas porque les avergüenzan, pese a que hayan obtenido placer, riquezas o gozo de esta manera. Su lógica y conciencia les castiga y aunque mientan a los demás y a sí mismos, eso que hicieron les incomoda, mientras que una vida honrada jamás te hará sentir remordimientos ni culpa, sino un estado de bienestar y alegría, que además se contagia.

Desde que aprendí eso, el IF THEN rige mi vida. junto con otra condición semejante, se trata del WHAT IF, es decir: "Qué pasaría si..." Combinados hacen que yo reflexione cada vez que voy a tomar una decisión: "¿Qué pasaría si me robo una camisa?" "Si me robo una camisa, entonces me pueden meter a la cárcel... y mi familia se sentirá decepcionada". Quien en su vida no toma en cuenta seriamente esas condicionales, tarde o temprano les regresará su THEN, muy cargado de culpas, de verdades incómodas y de dedos señalándoles como culpables de algún delito.

Espero querido lector, que pueda entender este pequeño mensaje. No quiero quitarle su libre albedrío, ni obligarle a que sólo haga lo bueno porque será castigado por mil demonios, no, ni mucho menos. Quiero que decida por sí mismo su camino, dado a que su lógica y su vida es totalmente distinta a la mía, pero ya lo he dicho en otro artículo de este mismo blog: A toda acción le corresponde una reacción de igual magnitud y en sentido contrario, como lo especifica la Tercera Ley de Newton. Así de simple, de nuestras acciones dependen nuestro futuro y nuestro progreso, como personas y sociedad. Practíquelo, no se arrepentirá.


Luis Miguel Mora Ramírez

Comentarios

  1. Luis muy elocuente como siempre, con tus comentarios
    Muy oportuno por éstas de reflexión
    A Cristo lo castigaron y crucificaron injustamente
    Y nuestros políticos delincuentes PARECE que se salen con la suya y gozarán de impunidad
    Pero sabemos que no se escaparan de las consecuencias de sus actos
    De Hecho nadie se escapa de la justicia divina, para bien y para mal, ... como se dice "Ya lo pagarás con Dios"
    Saludos abrazos y felicidades
    Larga vida y mucha salud mi querido Luis Mora

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas populares