¡Dejen que Trump haga su muro! ¡Es nuestra oportunidad de crecer!

Tal vez muchos tildarán de estúpido el encabezado de mi entrada en el blog, pero históricamente hablando, aquellos gobernantes que aislan a sus países y radicalizan la política exterior hacia sus países vecinos, estrangulan y hacen caer en crisis a su pueblo. Le sucedió en su momento a la URSS, a China, a Japón, a Alemania Oriental, a Camboya, a Corea del Norte y a Venezuela, incluso Cuba, pese a que ese país fue forzado por los Estados Unidos a hacerlo.

En el hipotético (Y ya muy probable, gracias a la innecesaria invitación del presidente Peña Nieto a nuestro país) caso de que Trump ganara las elecciones como presidente de los Estados Unidos de América, la primera promesa de campaña que realizó será exigida por sus votantes: Repatriar a los mexicanos, incluso a los nacionalizados y nacidos en EEUU. Bien, primero que nada, los ciudadanos mexicanos que viven en ese país son una fuerza laboral bastante grande, que no se arredran ante el trabajo duro, que aman a su familia y que se han sacrificado por ellos, pero hay algo que no sabe Trump: Ellos ya aprendieron a trabajar al estilo americano, y entre los que viven en ese país, legal e ilegalmente, hay desde doctores, empresarios, economistas, científicos, carpinteros, pintores, constructores, mecánicos, agricultores, etc. Son una fuerza laboral enorme, organizada, capacitada, bilingüe y que ha dejado de pensar como el mexicano promedio. Pueden ser ellos quienes salven a México, si se llegara a dar el caso de que Trump cumpla esa promesa, lo cual dudo, sinceramente. Perro que ladra, no muerde.

La segunda promesa de campaña de Trump fue construir un muro en la frontera con México, con nuestro dinero, y hasta llegó a decir que con mano de obra mexicana. Sus votantes se lo van a exigir, obviamente, pero vuelve a ser el mismo caso, él no puede hacerlo, debe ser bajo el consenso de las cámaras y los representantes de los distintos estados de la Unión van a estar divididos al respecto, si se acepta por mayoría tardará un tiempo en realizarse, no es cosa de porque yo lo digo se hace y ya. Costará tiempo y dinero (que obviamente no puede ser del presupuesto mexicano, porque no es propiedad de los Estados Unidos, ni las remesas, pues no las puede congelar en un ratito) Además de que tendrá que dirigir sus tiempos a otros puntos más urgentes de su agenda como presidente de los Estados Unidos de América. La salud, la seguridad, la educación, el trabajo, las relaciones internacionales, sus responsabilidades como jefe de estado y miembro de los distintos grupos internacionales en los que su país es pieza clave, y de los cuales se ha olvidado en su campaña presidencial, para ganar votantes se centró en atacar a los mexicanos, y le dio atole con el dedo a sus conciudadanos. 

Ambos casos, en el supuesto de que Trump pueda capitalizarlo, debilitará financiera y laboralmente a los Estados Unidos, pues repito, el mexicoamericano ya no es el ciudadano promedio que se fue al norte para traer dinero a su familia, es un empleado capacitado en cada una de sus labores, capaz, tenaz, luchón y que ve una oportunidad donde los demás solo vemos polvo. El gobierno mexicano PUEDE utilizar el capital humano (y económico) que sería un trabajador especializado en cada una de sus disciplinas e incentivar el crecimiento de nuestro país si hace que nosotros cambiemos nuestra perspectiva, si da la oportunidad y el apoyo a quienes estén dispuestos a trabajar. Nuestras ventajas: seríamos el país meridional más cercano a Centro y Sudamérica, y somos entrada a importaciones de países de Europa y Asia. Los países más cercanos a Estados Unidos serían Canadá, Rusia, Dinamarca (y esto tan solo nominalmente, porque hablamos de Groenlandia, que es una región autónoma del reino) y el Reino Unido. La Unión Europea obviamente tendrá su acercamiento con EEUU, pero ellos están aún solucionando algunos detalles internos con respecto a sus miembros. Y los asuntos planteados por Trump, les afectarían negativamente, debido a que las empresas europeas que trabajan en Estados Unidos contratan a... Adivinaron, ciudadanos mexicanos. De hecho, hay empresas norteamericanas que ya han expresado su deseo de invertir en la creación de plantas en nuestro país en lugar de en suelo americano si gana Trump porque hay menores impuestos y la mano de obra es más barata. Señor Trump, la tiene difícil... Peña Nieto fue débil e irreflexivo ante usted, pero con eso ya nosotros hemos visto unos de sus propios errores: Usted es un simple bravucón. Cumpla sus amenazas, lo reto a hacerlo, y usted por sí mismo estará parándose frente a una horca, anudando su nudo en el cuello y tirando de la palanca para abrir la escotilla que lo tirará del patíbulo. 

Mi propuesta a Enrique Peña Nieto y a Luis Videgaray (actualización, Antonio Meade) es la siguiente: En el caso que gane Trump, bajen impuestos, hagan atractiva la inversión en México, inviten a nuestros conciudadanos a regresar libremente al país, mejoren el trato a migrantes para hacer de éste un mejor país e inviten a Centro y Sudamérica a hacer lo mismo, será una reacción en cadena que limpiará sus nombres y demostrará que tienen visión y no son simples títeres de un bravucón irreflexivo y ególatra como lo es Donald Trump. Señor Peña Nieto, se que yo no soy su admirador, no sé de economía ni de diplomacia y le he criticado más de una vez, pero le diré algo, yo amo a mi país y deseo que este sea un mejor lugar, aproveche la ocasión. Es el momento ideal para hacerlo.


Luis Miguel Mora Ramírez

Comentarios

Entradas populares